¿Qué es la trata de personas?
Es un proceso que va desde contactar y convencer, trasladar o recibir a personas a través de engaño, fuerza, amenaza o cualquier forma de imposición con el objetivo de explotar a las víctimas. Puede ser para fines laborales o sexuales.
Es un delito grave que puede afectar varios derechos humanos.
Cualquier persona puede ser víctima de trata, pero corren más riesgo las personas migrantes, mujeres, niñas y niños y personas en situación de extrema precariedad socio-económica.
Este delito puede darse dentro del mismo país o de manera internacional. No necesariamente implica el cruce de fronteras.
Algunas formas en que aparece la trata de personas:
- el trabajo forzoso
- el obligar a personas a casarse o convivir a la fuerza
- la esclavitud o servidumbre
- comercialización de órganos
- la prostitución de otras personas
- la explotación sexual
¿La trata de personas es un delito?
Sí. Las leyes chilenas sancionan este delito, y las penas son mayores si las víctimas son niñas, niños o adolescentes.
También es delito colaborar con la trata, promoviéndola, facilitándola o financiándola.
Ser víctima de trata no es un delito.
¿Cuando existe trata de personas?
Hablamos de trata cuando se busca explotar a personas por acciones como:
Forzar o convencer a una persona o grupo para hacer algo.
Transportar o trasladar a una persona hacia el lugar donde desempeñará una tarea u obtendrá algo.
Transportar o trasladar a una persona hacia el lugar donde desempeñará una tarea u obtendrá algo.
En los casos de menores de 18 años, hay trata de personas siempre que se hace algo con el fin de explotarlos. No es necesario que existan amenazas, engaños o violencia.
Recuerda: La prevención es clave
Cuídate y cuida de tu comunidad. La información es muy importante para evitar caer en redes de trata. Presta atención a señales que pueden advertirte, por ejemplo:
- Ofertas laborales que ofrecen condiciones extraordinarias.
- Lugares de trabajo que se niegan a entregar una dirección exacta antes de comenzar las labores.
- Ofrecimientos que piden hacer cosas en secreto o sin contarle a familiares.
- Promesas de condiciones que están vinculadas a la entrega de fotos o información personal que no son pertinentes.
Atención ante estas situaciones: Puedes estar siendo testigo o víctima de trata.
- Alguien retiene los documentos de identidad (cédula de identidad o pasaporte) u otro objeto de valor.
- Las personas no pueden trasladarse o moverse libremente.
- Se impiden las visitas o comunicaciones con familiares o amistades.
- Se piden o fuerzan favores sexuales en el trabajo y no es posible denunciarlos o renunciar.
- Se trabaja de manera constante más de 45 horas a la semana o bajo condiciones que atentan contra la dignidad de las personas. Como por ejemplo, no permitir beber agua, ir al baño, alimentarse o descansar.
- Se emplea niños o niñas.
- Las condiciones de trabajo son muy distintas a las comprometidas y no permiten renunciar al trabajo.
- Retienen el salario o parte del sueldo por cobros por parte del empleador. Como por ejemplo, gastos por alojamiento o transporte.
- Alguien vinculado al trabajo o lugar de hospedaje controla el dinero y compras personales.
- Se busca que alguien haga trabajos, servicios o siga en un lugar bajo amenaza de maltrato o violencia.
- Se amenaza con denunciar a la policía, autoridades o servicios locales, como migración, por ejemplo.
Denuncia la trata y contacta al INDH
Si crees que eres testigo o víctima de trata, acércate al Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH).
En el INDH podemos recibir tu denuncia y entregarte información.