INFOGRAFÍA
Verdad
La Caravana de la Muerte llegó el 30 de septiembre de 1973 a la región. Recorrió las ciudades de Curicó, Talca, Linares, y Cauquenes.
El mismo 30 de septiembre, Arellano Stark ordenó que le fueran entregados dos militantes socialistas que habían sido parte del Grupo de Amigos Personales del Presidente (GAP), quienes se encontraban detenidos en la Cárcel de Curicó. Los detenidos habían viajado el 11 de septiembre desde Santiago, siendo interceptados por militares a la altura del río Huayquillo. La comitiva ordenó el traslado de los detenidos al Regimiento Tacna, en Santiago, donde permanecieron privados de libertad hasta el 5 de octubre. Esa noche, los oficiales del Regimiento trasladaron a los detenidos a San Bernardo para fusilarlos. Sus restos fueron llevados al Servicio Médico Legal.
Arellano Stark relevó en persona al jefe de zona de Talca, el comandante Efraín Jaña, ordenando su arresto y sometiéndolo a un Consejo de Guerra. Los motivos de su destitución: no aplicar mano dura, en particular, con el ex intendente de la ciudad, German Castro, militante socialista. Jaña fue uno de los primeros altos mandos que se negó a la represión. Fue encarcelado y torturado, siendo calificado como víctima Valech.
En Linares fueron ejecutadas cuatro personas, provenientes de San Javier: tres funcionarios de la Corporación Reforma Agraria (CORA) detenidos el 11 de septiembre, y un estudiante de enseñanza media detenido el día 13. Se encontraban presos en la Cárcel Pública de Linares cuando se les instruyó una causa en su contra por parte de la Fiscalía Militar de la ciudad. Fueron llevados a la Escuela de Artillería de Linares, donde se encontraba la comitiva. El día 2 de octubre, los transportaron hasta el Polígono de Tiro General Bari, donde los fusilaron sin haberse realizado el Consejo de Guerra que autorizara los actos.
Finalmente, la Caravana dejaría otras cuatro víctimas en la región. El 4 de octubre, en Cauquenes, dos técnicos agrícolas, un trabajador de la CORA, y un estudiante y dirigente de las Juventudes Socialistas de la zona. Según la versión oficial entregada mediante un Bando Militar transmitido por radio, los 4 detenidos fueron sacados del Cuartel de Investigaciones de Cauquenes para hacer una reconstitución de escena en el fundo “El Oriente”, pero habrían aprovechado la circunstancia para atacar a sus custodios y escapar. Por ese motivó se les disparó inmediatamente, aplicando la ley de fuga. Los cuerpos fueron llevados por los militares al hospital de la ciudad, donde se les realizó la correspondiente autopsia. Luego, los militares enterraron en fosas comunes a los fusilados en el Cementerio General de Cauquenes.
Justicia
Por los crímenes ocurridos en Curicó, la Justicia condenó a Joaquín Ramírez Pineda el 2015, a dos penas de 15 años y 3 años y 1 día. Ramiréz fue el comandante del regimiento Tacna, quien ordenó al capitán Luis Guillermo Mena Sepúlveda llevar a cabo la ejecución de los detenidos. También fueron procesados los oficiales del ejército Carlos Enrique Massouh Mehech y César Alfonso Corvalán, el primero fue absuelto, y el segundo, sobreseído.
Por lo ocurrido en Linares fueron procesadas 5 personas. Sergio Arellano Stark y Carlos Luis Romero Muñoz –brigadier en esa época– fueron condenados a 10 años y 1 día. Mario Armando Axel Cazenave Pontilla, coronel secretaria de la Fiscalía Militar; José Alejandro Parada Muñoz, suboficial mayor; y Julio Antonio Barros Espinace, sargento primero; a sufrir la pena de 3 años y 1 día cada uno. En 2008 se volvió a procesar a Arellano Stark por estos hechos, siendo condenado a 6 años de prisión, la primera condena en este caso emblemático. Sin embargo, el Servicio Médico Legal acreditó, el mismo año, que el general en retiro padecía demencia, por lo que cumplió su pena en prisión domiciliaria.
Por último, los juicios sobre las ejecuciones en Cauquenes iniciaron a finales de la década de 1990. En el año 2000 se acogió el desafuero de Pinochet en el caso. En 2003 fueron procesados Arellano Stark, Marcelo Moren Brito y Pedro Espinoza. Las condiciones de salud de Arellano Stark impidieron la continuación de sus acusaciones, siendo sobreseído. En 2015, la Corte de Apelaciones de Santiago volvió a procesar a estos, junto a otros integrantes del Ejército. Pero no fue hasta 2023 que se consiguieron condenas: la Corte Suprema condenó a Pedro Espinoza a 2 años, a Juan Chiminelli a 10 años; ambos como autores del delito. En tanto, Emilio Robert de la Mahotiere fue condenado a 5 años como encubridor. También fue condenado el ex oficial Jorge Godofredo Acuña Hahn a 3 años, con el beneficio de la libertad vigilada, en calidad de cómplice. Los otros procesados fallecieron en el curso de la causa.
Memoria
Los organismos de derechos humanos y las agrupaciones de familiares, como la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos y Ejecutados Políticos (AFDD) de las ciudades de la región siguen activas. Cada 3 de octubre, desde 1974, se realiza un acto conmemorativo por las víctimas de la Caravana de la Muerte en el Cementerio General de Cauquenes, habiendo también una serie de memoriales que relevan la memoria y vida de estas personas.
Víctimas
- Wagner Herid Salinas Muñoz (30 años, miembro del GAP, militante del Partido Socialista)
- Francisco Urcisinio Lara Ruiz (22 años, miembro del GAP, militante del Partido Socialista)
- Teófilo Arce Tolosa (26 años, funcionario de la CORA)
- Mauricio González Norambuena (20 años, jefe local de la CORA)
- Segundo Sandoval Gómez (19 años, estudiante secundario y dirigente estudiantil)
- José Sepúlveda Baeza (22 años, estudiante universitario)
- Manuel Plaza Arellano (25 años, técnico agrícola, militante del Partido Socialista)
- Claudio Lavín Loyola (29 años, técnico agrícola, militante del Partido Socialista)
- Miguel Muñoz Flores (21 años, funcionario de la CORA, militante del Partido Socialista)
- Pablo Vera Torres (22 años, estudiante, dirigente de las Juventudes Socialistas)